Fractura de Acetábulo
Una fractura del acetábulo se trata de una ruptura en la cavidad cotiloidea de la articulación de la cadera. La gravedad de esta lesión es debida a que en ella se encuentra el movimiento de la articulación de la cadera. La evolución de la misma depende de factores como el número y el tamaño de los fragmentos de la fractura, la lesión de las superficies del cartílago, tanto del acetábulo como de la cabeza del fémur, y de la lesión de los tejidos blandos circundantes, como los músculos, tendones, nervios y piel.
Este tipo de fracturas se producen en dos tipos de pacientes, accidentes de alta intensidad como accidentes de trafico o caídas de gran altura o bien en pacientes ancianos con fragilidad ósea que sufren osteoporosis. Este tipo de fracturas suelen acompañarse de fracturas asociadas por lo cual es muy importante la evaluación de las mismas.
El tratamiento de estas fracturas consiste en un primer momento en descartar lesiones asociadas, en un segundo momento se deberá intentar evitar el movimiento continuo de la fractura colocando una inmovilización consistente en una tracción esquelética mediante un peso que evitara el movimiento de estos fragmentos.
El tratamiento quirúrgico de estas fractura consiste en la colocación de soportes internos o externos que permitirán la colocación de la fractura para producir un movimiento y una carga precoz disminuyendo con esto las complicaciones de la inmovilización prolongada. Este tipo de fracturas son potencialmente productoras de artrosis postraumática sobre todo en pacientes de alta edad y en aquellas fracturas que presenten muchos fragmentos, por lo que a veces un posible tratamiento quirúrgico es la colocación de una artroplastia de cadera si la posibilidad de esta complicación es muy elevada.